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El impacto de la forma de las partículas en la formación de cristales

Este estudio revela cómo la forma de las partículas afecta su disposición en cristales.

― 6 minilectura


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La disposición de las partículas puede llevar a la formación de cristales. Este proceso está influenciado por la forma de las partículas involucradas. Las Formas de estas partículas pueden limitar cómo se juntan para formar una estructura sólida. Para formas simples, predecir cómo se organizarán en cristales es relativamente fácil. Sin embargo, para formas más complejas, la tarea se vuelve complicada.

En nuestra investigación, examinamos cómo ciertas formas, específicamente poliedros duros, se juntan para formar estructuras cuando se colocan en un espacio curvo, como la superficie de una esfera. Usamos simulaciones por computadora para estudiar este proceso. Durante las simulaciones, encontramos que muchos poliedros podían organizarse en estructuras de llenado, o cristales, cuando se colocaban en una superficie curva.

A medida que cambiamos la forma del espacio para hacerlo más plano, observamos cómo las formaciones de los cristales cambiaban. Clasificamos las estructuras resultantes según si estaban relacionadas con los patrones de empaquetamiento curvos originales o si surgían debido a frustraciones en las disposiciones de las formas.

La Importancia de la Forma

La forma juega un papel crucial en cómo las partículas se organizarán. Para la ciencia de materiales y campos similares, entender cómo la forma de estas partículas afecta su ensamblaje es vital. Por ejemplo, ciertas formas duras hechas de partículas pueden ensamblarse en varios tipos de cristales solo con ligeros cambios en sus formas.

Sin embargo, predecir qué formas de partículas llevarán a Estructuras cristalinas deseadas puede ser complicado. Esto es especialmente cierto al tratar con formas más complejas. Para la mayoría de los poliedros, llenar el espacio con sus formas no es sencillo. En muchos casos, las restricciones geométricas obstaculizan estas formas. Pero, cuando el espacio es lo suficientemente curvo, estas restricciones pueden disminuirse o evitarse por completo.

El Papel de la Curvatura

Usando nuestras simulaciones, nos propusimos determinar qué tan bien los poliedros duros podían autoensamblarse en estructuras cristalinas en superficies curvas. Nos centramos en los sólidos platónicos-estas son formas bien definidas, como cubos y tetraedros. Nuestro objetivo era ver si la naturaleza flexible de la curvatura permitiría que estas formas se organizaran en estructuras de llenado de espacio.

Sorprendentemente, encontramos que bajo condiciones específicas en nuestras simulaciones, tetraedros, dodecaedros y octaedros podían efectivamente formar sus estructuras perfectas correspondientes en un entorno positivamente curvado. A medida que hacíamos el espacio menos curvado y nos movíamos hacia un diseño plano, comparamos qué tan bien estas partículas aún se ajustaban a sus arreglos curvos.

Observaciones del Autoensamblaje

A medida que ajustábamos la curvatura del espacio, observábamos diferentes comportamientos en cómo las partículas se juntaban. Para algunas formas como tetraedros y dodecaedros, había señales notables de su empaquetamiento curvo original incluso cuando convertíamos el espacio en una estructura plana.

Sin embargo, los octaedros e icosaedros no mostraron las mismas características. En su lugar, sus ensamblajes en el espacio plano parecían desarrollar estructuras completamente diferentes que no estaban ligadas a ninguno de los patrones de empaquetamiento previos. En este caso, las formas se reorganizaron de manera que les permitieron maximizar el llenado de espacio de manera uniforme.

Esto nos mostró que no todas las formas siguen las mismas reglas al pasar de un espacio curvo a uno plano. Los patrones de disposición debido a la curvatura variaron significativamente entre diferentes formas.

El Proceso de Autoensamblaje en Detalle

Para investigar más a fondo cómo las formas pueden autoensamblarse, miramos de cerca los arreglos de tetraedros, octaedros y dodecaedros en sus respectivos espacios curvos. Usando los parámetros adecuados, pudimos realizar simulaciones que proporcionaron información sobre cómo se desarrollaron los clústeres y las estructuras.

Para los tetraedros, notamos que cuando se reunían en mayor número en una superficie curva, se agrupaban en una estructura llamada 600-célula. Sin embargo, cuando intentamos aplanar esta estructura, presentó desafíos. La 600-célula no pudo ser comprimida perfectamente en una versión plana, lo que llevó a defectos dentro del ensamblaje.

Los octaedros y dodecaedros demostraron una tendencia a organizarse más cerca de sus arreglos ideales cuando estaban en espacio curvo. Cuando comenzamos a alterar la curvatura, aparecieron diferentes defectos e irregularidades. Esto mostró que, mientras algunas formas lograban mantener sus estructuras cristalinas, otras luchaban por organizarse de manera eficiente.

Aplanamiento del Espacio

Para entender cómo las formas se adaptan a medida que cambia la curvatura de su espacio, hicimos experimentos que aplanaban gradualmente el espacio. Al hacer esto, observamos cómo las ensamblajes se transformaban cuando se removían las condiciones originales. A medida que el espacio se volvía más plano, rastreamos cómo formas como tetraedros y dodecaedros ajustaban sus estructuras.

Curiosamente, una vez que agregamos más partículas a los ensamblajes, las estructuras comenzaron a presentar múltiples arreglos locales. Para los dodecaedros, por ejemplo, había entornos distintos que se desarrollaban a medida que la forma se veía forzada a adaptarse a un arreglo más plano.

Los tetraedros mostraron una adaptabilidad similar. Su construcción a menudo se inclinaba hacia una configuración de cuasicristal, que es menos ordenada pero todavía mantiene un cierto nivel de estructura.

Los octaedros tomaron un camino diferente, donde en lugar de formar arreglos complejos, transicionaron a estructuras de empaquetamiento más simples. Al explorar cómo emergían las estructuras en diferentes condiciones, comenzamos a ver el vínculo entre la curvatura y la disposición de partículas.

Conclusiones y Direcciones Futuras

A través de nuestros estudios, destacamos cómo la disposición de poliedros duros se relaciona con las formas y patrones vistos en el espacio curvo. Nuestras simulaciones revelaron que estas partículas tienden a auto-organizarse en formas estructuradas cuando se colocan adecuadamente.

Este mapeo de formas a sus estructuras cristalinas no solo es innovador, sino que nos lleva a entender cómo las partículas pueden adoptar configuraciones en función de su entorno. A medida que miramos hacia adelante, integrar otras formas de partículas o interacciones más complejas podría ampliar nuestra comprensión de estos procesos de autoensamblaje.

Al introducir propiedades de partículas flexibles, podríamos ampliar el rango de formas que pueden autoensamblarse de manera eficiente, llevando a nuevos conocimientos sobre el diseño y los métodos de ensamblaje de materiales. Nuestra investigación abre la puerta a una exploración más profunda de cómo la geometría influye en el comportamiento de los materiales a nivel fundamental.

Fuente original

Título: Rationalizing Euclidean Assemblies of Hard Polyhedra from Tessellations in Curved Space

Resumen: Entropic self-assembly is governed by the shape of the constituent particles, yet a priori prediction of crystal structures from particle shape alone is non-trivial for anything but the simplest of space-filling shapes. At the same time, most polyhedra are not space-filling due to geometric constraints, but these constraints can be relaxed or even eliminated by sufficiently curving space. We show using Monte Carlo simulations that the majority of hard Platonic shapes self-assemble entropically into space-filling crystals when constrained to the surface volume of a 3-sphere. As we gradually decrease curvature to "flatten" space and compare the local morphologies of crystals assembling in curved and flat space, we show that the Euclidean assemblies can be categorized either as remnants of tessellations in curved space (tetrahedra and dodecahedra) or non-tessellation-based assemblies caused by large-scale geometric frustration (octahedra and icosahedra).

Autores: Philipp W. A. Schönhöfer, Kai Sun, Xiaoming Mao, Sharon C. Glotzer

Última actualización: 2023-05-12 00:00:00

Idioma: English

Fuente URL: https://arxiv.org/abs/2305.07786

Fuente PDF: https://arxiv.org/pdf/2305.07786

Licencia: https://creativecommons.org/licenses/by/4.0/

Cambios: Este resumen se ha elaborado con la ayuda de AI y puede contener imprecisiones. Para obtener información precisa, consulte los documentos originales enlazados aquí.

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