Entendiendo el temperamento del ciervo brocket rojo
Aprende cómo el temperamento afecta el entrenamiento y cuidado de los ciervos brocket rojos.
Lara Caveanha Gragnanello, Mariana Parra Cerezo, Cristiane Schilbach Pizzutto, Mateus José Rodrigues Paranhos da Costa
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Tabla de contenidos
El temperamento es como la vibra personal de un animal. Es un conjunto de rasgos que deciden cómo se sienten, piensan y actúan en diferentes situaciones. Así como los humanos tenemos nuestras rarezas, los animales también muestran patrones únicos en su comportamiento. Entender estos patrones es importante, sobre todo cuando se trata de cuidar a los animales y asegurar su bienestar. Al observar de cerca el temperamento, podemos encontrar formas de mejorar nuestra interacción con ellos y gestionar su cuidado.
Por qué importa el temperamento
En la naturaleza, los animales tienen que ser rápidos y cautelosos para sobrevivir. Esto es especialmente cierto para los ciervos, como el ciervo brocket rojo. Estos ciervos tienen un instinto natural de estar alerta y tener cuidado con su entorno. Sin embargo, cuando están bajo el cuidado humano, estos instintos pueden complicar las cosas. Puede ser difícil para los cuidadores gestionar su salud y detectar problemas a tiempo.
El ciervo brocket rojo no es cualquier ciervo; es un poco más pequeño que el promedio, alcanzando alrededor de 65 cm de altura y pesando entre 30 y 40 kg. Lamentablemente, estos ciervos no han sido bien estudiados, y por eso su temperamento vale la pena investigar. Cuanto más sepamos sobre su comportamiento, mejor podremos ayudar a mantenerlos a salvo.
Los retos de cuidar a los ciervos brocket rojos
Cuidar animales a menudo implica manejarlos, y los ciervos brocket rojos pueden ser complicados. Sus patas fuertes pueden causar lesiones a las personas si no se manejan correctamente. Aunque la restricción física pueda sonar como una solución, puede llevar a lesiones y estrés para el ciervo. En lugar de eso, los cuidadores a menudo recurren a restricciones químicas, las cuales pueden afectar el comportamiento del animal durante días después del procedimiento inicial.
Dado estos desafíos, los científicos y cuidadores están recurriendo a un método diferente: el condicionamiento operante. Este enfoque usa refuerzo positivo para enseñar a los animales ciertos Comportamientos. Piensa en ello como una sesión de Entrenamiento donde los animales reciben golosinas por hacer lo que se les pide, ¡algo así como un juego de buscar pero con ciervos!
El papel del condicionamiento operante
El condicionamiento operante es un método de entrenamiento que ayuda a moldear el comportamiento a través de recompensas. La idea es simple: cuando un animal hace algo bien, ¡recibe una golosina! Este método no solo ayuda con el entrenamiento, sino que también mejora la calidad de vida de los animales. Menos dependencia de métodos físicos o químicos significa que los ciervos pueden vivir con menos estrés.
Entonces, ¿cómo funciona esto para el ciervo brocket rojo? En este caso, cada ciervo pasa por una fase de entrenamiento que incluye acostumbrarse a sus entrenadores y aprender comandos. Cuanto más podamos entender cómo reaccionan los diferentes ciervos al entrenamiento, mejor podremos hacer que su cuidado sea más fácil y eficaz.
Conociendo a los ciervos
En un estudio reciente, los científicos querían conocer mejor la personalidad del ciervo brocket rojo. Trabajaron con 12 ciervos que vivían en un centro de conservación. Para empezar, el equipo evaluó el temperamento de cada ciervo usando diversas pruebas. Estas pruebas implicaron hacer observaciones en diferentes situaciones, como cómo reaccionaban los ciervos ante personas desconocidas o cómo se movían al ser manipulados.
Los ciervos fueron puntuados según sus respuestas. ¿Se acercaron a la persona desconocida? ¿Saltaron al ser movidos? Estas observaciones ayudaron a los investigadores a entender mejor la personalidad de cada ciervo.
Los resultados mostraron que algunos ciervos eran más reactivos y nerviosos, mientras que otros eran más tranquilos y dispuestos a interactuar. Esta información es crucial porque puede ayudar a los cuidadores a adaptar sus técnicas de entrenamiento para cada ciervo individual. Así como algunas personas prefieren un empujoncito suave para moverse, mientras que otras necesitan un poco de motivación.
El proceso de aprendizaje
Una vez que los científicos entendieron el temperamento de cada ciervo, comenzaron el proceso de entrenamiento. Lo dividieron en dos fases: primero, acostumbrar a los ciervos a los entrenadores, y luego pasar a los comandos reales. Durante la primera fase, los entrenadores interactuaban con los ciervos, usando golosinas para construir confianza. Se sentaban en silencio, llamaban a los ciervos por su nombre y ofrecían algunos bocados sabrosos. Esta fue la fase de "seamos amigos".
En la segunda fase, la verdadera diversión comenzó. Los entrenadores usaron condicionamiento operante para enseñar comandos específicos. Cada vez que el ciervo seguía un comando, como acercarse o tocar su hocico a un objetivo, recibía una golosina. Este método hacía que el entrenamiento se sintiera más como un juego, lo cual es mucho más agradable tanto para los ciervos como para los entrenadores.
Resultados del entrenamiento
Después de las sesiones de entrenamiento, los investigadores notaron una clara diferencia en cuán rápido aprendía cada ciervo. Los que eran más tranquilos y menos reactivos aprendieron los comandos más rápido. Algunos ciervos aprendieron en solo unas pocas sesiones, mientras que otros lucharon y necesitaron muchos más intentos. ¡Es como la diferencia entre un cachorro ansioso aprendiendo trucos y un gato terco que solo quiere dormir!
Los ciervos que tardaron más en adquirir el entrenamiento eran a menudo aquellos con temperamentos nerviosos o reactivos. Les resultaba difícil sentirse cómodos con sus entrenadores y el proceso de aprendizaje. Por otro lado, los ciervos más audaces y tranquilos sobresalieron, aprendiendo los comandos relativamente rápido.
Las diferencias individuales importan
Cada ciervo es diferente, y sus personalidades juegan un papel enorme en qué tan bien aprenden. Este estudio mostró que si los cuidadores son conscientes de la personalidad única de cada ciervo, pueden ajustar sus métodos de entrenamiento en consecuencia. Por ejemplo, acercarse demasiado a un ciervo nervioso de inmediato podría asustarlo, mientras que un ciervo más tranquilo podría apreciar un enfoque más directo.
Los hallazgos resaltan la necesidad de estrategias de entrenamiento personalizadas. Si los cuidadores pueden reconocer los rasgos de personalidad de cada ciervo, pueden mejor apoyarles durante el proceso de aprendizaje. Es una situación en la que los ciervos se sienten seguros y los entrenadores pueden enseñarles eficazmente.
Conclusión
En general, el estudio del temperamento en ciervos brocket rojos ilumina la importancia de entender el comportamiento animal. Saber cómo reaccionan los diferentes ciervos puede mejorar enormemente los resultados del entrenamiento y el bienestar general de estos animales.
Esta investigación enfatiza que los animales, al igual que los humanos, tienen personalidades únicas que dan forma a cómo aprenden e interactúan con su entorno. Entender estas diferencias es vital para mejorar las prácticas de entrenamiento y asegurar que los ciervos brocket rojos prosperen bajo el cuidado humano. Después de todo, cada ciervo merece la oportunidad de aprender, crecer y prosperar de una manera que se adapte a sus necesidades individuales, ¡preferiblemente con muchas golosinas en el camino!
Título: Assessing the impact of temperament on training efficiency in x-situ Red Brocket Deer (Mazama americana)
Resumen: The personality of wild animals has been extensively discussed due to its significant influence on ex-situ management and conservation methods. However, there is still limited research directly addressing its impact on habituation and conditioning processes, which are essential techniques in conservation centers, zoos, and research institutions. This study aimed to demonstrate how individual personality variation affects training. We conducted the research at the Deer Research and Conservation Center of the Faculty of Agricultural and Veterinary Sciences, Sao Paulo State University, in Jaboticabal-SP, Brazil, with twelve red brocket deer (Mazama americana). Temperament tests were performed at the beginning of the study, assessing the animals reactivity to the presence of an unfamiliar human and during handling procedures. Following these tests, we initiated the processes of habituation and training of the animals. Three deer did not habituate to the trainers presence, being not subjected to operant conditioning; and four did it in just seven sessions. Among the nine deer that participated in the conditioning process, only five learned all the commands, representing a success rate of 41.66%. We concluded that more reactive animals, characterized as nervous and agitated, exhibited poorer performance in training. In contrast, less reactive animals, which were calmer and either allowed to approach or approached voluntarily an unfamiliar person, learned the commands more effectively.
Autores: Lara Caveanha Gragnanello, Mariana Parra Cerezo, Cristiane Schilbach Pizzutto, Mateus José Rodrigues Paranhos da Costa
Última actualización: 2024-11-30 00:00:00
Idioma: English
Fuente URL: https://www.biorxiv.org/content/10.1101/2024.11.28.625851
Fuente PDF: https://www.biorxiv.org/content/10.1101/2024.11.28.625851.full.pdf
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